Dice que se empina y que no alcanza
que sólo ha llegado hasta el dolor
dice que ha perdido la buena esperanza
y se refugia en la piedad de la ilusión.
Sé de las entrañas de su queja
porque padecí la decepción
fue una noche larga que el tiempo despeja
mientras suena en mi memoria esta canción:
Venga la esperanza,
venga sola a mí
lárguese la escarcha, vuele el colibrí
hínchese la vela,
ruja el motor
que sin esperanza ¿dónde va el amor?
Cuando niño yo saque la cuenta
de mi edad por el año dos mil
El dos mil sonaba como puerta abierta
a maravillas que silbaba el porvenir.
Pero ahora que se acerca saco en cuenta
que de nuevo tengo que esperar
que las maravillas vendrán algo lentas
porque el mundo tiene aún muy corta edad.
Venga la esperanza, pase por aquí
venga de cuarenta,
venga de dos mil
venga la esperanza, de cualquier color
verde, roja o negra, pero con amor.
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