viernes, mayo 26, 2023

Dicen que que cuando pasan cosas importantes cada uno recuerda donde estaba y qué hacía

 silvio dijo...

Dicen que que cuando pasan cosas importantes cada uno recuerda donde estaba y qué hacía. Aquela noche de mayo 19 yo me encontraba en el balconcito del apartamento de Germán Piniella y su familia, escuchando el discurso que ocurría a pocas calles de distancia. En los días anteriores Noel, Pablo y yo habíamos estado cantando sobre un camión del ICAIC, frente a la embajada de EEUU, reclamando la devolución de nuestros pescadores, que habían sido detenidos por fuerzas navales norteamericanas. Recuerdo que Pablo hizo una canción sobre el secuestro.


Una semana después de aquella noche escribí lo siguiente:


A los veintisiete días de mayo del año setenta

un hombre se sube sobre sus derrotas,

pide la palabra

momentos antes de volverse loco.

No es un hombre,

es un malabarista de una generación.

No es un hombre,

es quizás un objeto de la diversión;

un juguete común de la Historia

con un monograma que dice: «bufón».

Ese hombre soy yo.


Pero debo decir que me tocó nacer

en el pasado y que no volveré.

Es por eso que un día me vi en el presente,

con un pie allá donde vive la muerte

y otro pie suspendido en el aire,

buscando lugar,

reclamando tierra del futuro para descansar.

Así estamos yo y mis hermanos,

con un precipicio en el equilibrio

y con ojos de vidrio.


Ahora quiero hablar de poetas,

de poetas muertos y poetas vivos,

de tantos muchachos hijos de esta fiesta

y de la tortura de ser ellos mismos.

Porque hay que decir que hay quien muere

sobre su papel,

pues vivirle a la vida su talla tiene que doler.

Nuestra vida es tan alta ―tan alta―

que para tocarla casi hay que morir,

para luego vivir.


Yo no reniego de lo que me toca,

yo no me arrepiento pues no tengo culpa,

pero hubiera querido poderme jugar

toda la muerte allá, en el pasado,

o toda la vida en el porvenir que no puedo alcanzar.

Y con esto no quiero decir que me pongo a llorar.

Sé que hay que seguir navegando.

Sigan exigiéndome cada vez más,

hasta poder seguir

o reventar.


19 de mayo de 2023, 12:

No hay comentarios: